Sin duda, El Partido del Día. El derbi de Manchester es importante no solo para la ciudad, sino para medio mundo, independientemente del estado de forma de ambos equipos. Sin embargo, ninguno llega en su mejor momento, lo que promete un encuentro lleno de errores.
Hace una semana, el Man City finalmente logró romper su racha de siete partidos sin ganar, pero parece que una nueva serie negativa podría estar en camino. Aunque logró empatar 2:2 contra Crystal Palace, el equipo de Pep Guardiola tuvo dificultades evidentes (1.34-1.45 xG, 12 remates cada uno). En su visita a la Juventus en Turín, el Man City fue completamente superado (2:0), lo que ahora pone en duda su clasificación directa a los octavos de la Champions League.
Las lesiones en la defensa han obligado a Guardiola a realizar ajustes inesperados. Josko Gvardiol fue utilizado como central, mientras que Rico Lewis, un joven de 20 años que ya ha jugado en cinco posiciones esta temporada, ocupó el lateral izquierdo. Estas improvisaciones defensivas han dejado al equipo vulnerable, y está claro que Akanji, Aké y Stones no estarán disponibles para este partido.
El Man United enfrenta problemas similares en su defensa, con numerosos lesionados durante meses. Aunque Yoro ya está disponible, no es una opción preferente. Evans y Shaw siguen fuera, lo que limita las opciones de rotación para Ruben Amorim. En su último partido contra Nottingham Forest (2:3), intentó rotar, dejando a Mazraoui y Maguire en el banquillo, aunque ambos terminaron jugando los últimos 30 minutos. Además, los errores defensivos no solo afectan a los jugadores de campo, sino también al portero André Onana, quien cometió un grave fallo en el segundo gol, dejando un disparo pasar directamente por el centro.
Ambos equipos tienen problemas defensivos, pero mantienen un buen promedio ofensivo, con 1.8 goles por partido en todas las competiciones. Las defensas rotadas de ambos lados son propensas a fallar, por lo que este partido promete ser de alta anotación.
